La escaladora iraní Elnaz Rekabi, se volvió centro de atención por haber participado en el Campeonato de Asia sin usar el velo islámico, (hiyab) el cual cubre cabeza y cuello, lo que se interpretó como un gesto de solidaridad en medio de la ola de protestas que se viven en Irán tras la trágica muerte de Masha Amini, la joven de 22 años detenida por la policía de la moral por no llevar bien puesto el velo. Estas manifestaciones se han convertido en un movimiento contra el hiyab obligatorio. De acuerdo con las cifras compartidas por la ONG Iran Human Rights, 122 personas murieron por la represión de las autoridades allí.

Durante la competencia, Rekabi se mantuvo con la cabeza descubierta, usando una banda negra. Convirtiéndose en una de las pocas mujeres iraní que compite sin el velo islámico, El video que la muestra sin el hiyab se volvió viral en las redes sociales y plataformas de difusión de información, donde se convirtió en el centro de admiración y elogio, peo también en el foco de preocupación.

Su situación generó el temor de que pueda ser detenida de regreso a su país de origen, debido a que la norma deportiva de la República Islámica de Irán dice que las mujeres iraníes que compitan representando al país deben cubrirse con velo islámico. El incumplimiento de dicha norma llevaría a consecuencias terribles, incluso a la prisión, pues desde 1983 es obligatorio que las mujeres lleven la cabeza cubierta, incluyendo en competencias en el exterior.

Medios de comunicación comenzaron la difusión de información que causó revuelo, pues informaban que su pasaporte y su teléfono móvil  habrían sido confiscados por las autoridades iraníes.

Por otra parte el medio IranWire afirmó que la joven, de 33 años, habría sido trasladada a la prisión de Evin, la cual tuvo un incendio el fin de semana pasado. El medio además dijo que Rekabi tomó la decisión de aparecer sin velo desde hace un mes, pero que no quiso pedir asilo en Seúl, donde se llevó a cabo la competencia, porque su esposo se encuentra en Irán.

Sin embargo la embajada de Irán en Seúl desmintió la información y aseguró que la deportista vuela “junto con otros miembros del equipo” de regreso a Teherán.

Por otro lado Rekabi posteó en su historia de Instagram un mensaje aclaratorio “En la ronda final del Campeonato Asiático de Escalada celebrado en Corea del Sur, debido a la inapropiada programación y la llamada impredecible para escalar, involuntariamente mi vestimenta [el velo islámico] tuvo problema. Actualmente estoy regresando a Irán con el equipo, de acuerdo con el calendario preestablecido”, agregó

Algunos afirman que estas palabras habrían sido expresadas con el fin de apaciguar las acciones que el régimen iraní podría tomar en su contra. Por otro lado, otros afirman que se trata de «una confesión forzada».

Por su parte, la Federación Internacional de Escalada emitió un comunicado para subrayar que estaba siguiendo de cerca la situación: «Tenemos entendido que ha regresado a Irán y seguiremos vigilando la situación a su llegada. Es importante destacar que la seguridad de los deportistas es primordial para nosotros y apoyamos todos los esfuerzos para mantener a salvo a un valioso miembro de nuestra comunidad en esta situación.»